Una Cena 15 muy especial.

Pero las sorpresas no fueron solo para nosotros, para él también había algo preparado. Max, quería conocer de cerca el carro MX-15 “BISMARCK”, y así lo hizo: Max y su hijo subieron nada menos que a  40 metros de altura creando así una experiencia que difícilmente se olvidará.

Don Max escuchaba atentamente las explicaciones técnicas de nuestro Capitán sobre nuestra MX-15 y al escuchar la invitación de este a subir en el canasto, su respuesta fue inmediata y exclamó “Sí, por supuesto”.

La dificultad para subir al canasto debido a sus casi 97 años no hizo merma al entusiasmo que se apoderó de él en forma inmediata y se montó para empezar el ascenso. Una vez arriba disfrutó maravillado de las bondades de nuestra máquina y de la vista que acompañaba a un atardecer, que no me cabe ningún duda, permanecerá en su memoria por un largo tiempo.

Efectivos de la Decimoquinta compañía se apresuraron en acompañar y posar junto a dos sus sus íconos: los fundadores Dietrich Angerstein B. y Max Müller V. 

Abajo lo esperaban un grupo de Voluntarios que lo único que querían era tomarse una foto junto a él y a Dietrich Angerstein Brinck, primera antigüedad de la Compañía y quien fundara nuestra 15 hace mas de 53 años junto al doctor Müller y otros 32 visionarios integrantes de la colectividad alemana residente.

Después de varios paseos en el canasto del Bismark era hora para comer.

La cena se desarrolló en una ambiente de grata camaradería, las palabras de nuestro Director dieron el vamos a una jornada que nos traería más de una sorpresa.

Una vez acabada la cena, el Director informa que “el Bombero Max Müller quiere hacer uso de la palabra” y -poniéndose de pié- dio un discurso que a todos asombró.

“Estimados Camaradas:
Cuando nos habíamos reunido en la liga Chileno- Alemana para obedecer al deseo del Cuerpo de Bomberos que la comunidad Chileno –  Alemana se hiciera cargo también de una Bomba, se inició la reunión y se fueron escogiendo los autores de esto, apareció ahí mi amigo Waldemar Winter, gran compañero y gran bombero, estaba también un hombre que también hemos sido injustos con él me refiero mi amigo y compañero Walter Kauffmann  que quizás algunos no tengan buen recuerdo. Sin embargo muchos otros que estaban presentes saben lo que había significado esta elección, y que se estaban nombrando cada uno de los integrantes pertenecientes a la comunidad chileno alemana en la liga chileno alemana, y se fueron escogiendo y nombrando los títulos, unos tras otros, y se dijo:… ¡necesitamos un médico!… yo me agaché, y me hice más chico de lo chico que soy… pero el nombre mío salió y fui elegido primer médico de la Compañía de Bomberos, digo el primero porque hay otros colegas.

Iniciamos nuestras primeras reuniones y así recuerdo que íbamos a la Decimotercera  y otras Compañías para aprender y vivir lo que significaba ser Bombero. Hoy cuando decidí venir a esta reunión  y fui a sacar la placa de la 15, tengo que reconocer que no es flaqueza cuando a uno le corren las lagrimas a veces por recordar a los que han sido Fundadores, a los que están dispuestos a entregar su sangre en el momento del sacrificio, llevo el número 14 en el Registro de la Compañía y llevo esta placa con honor.

Pero señores, hoy he recibido con verdadero entusiasmo subir hasta los cuarenta metros en esta bomba, en esta grandiosa obra que se ha logrado realizar, subir en una bomba alemana tan completa es un verdadera orgullo, lo digo porque llevamos el nombre de bomba alemana y que corre por las venas de muchos Fundadores la sangre de aquellos que lucharon en otras épocas en las orillas del Rihn, aquellos que lucharon en  los campos de Europa,  en Chacabuco y en mil Batallas, somos formados en la sangre y en el fuego, pero ver a lo que se ha llegado en grandeza en esta Compañía es  verdadero orgullo pertenecer a ella, yo quiero felicitarlos que es casi como felicitarse a uno mismo, porque en la Bomba Alemana estamos dispuestos a entregarle nuestro amor y nuestra satisfacción en el cual circula también la sangre de los primeros que llegaron a Chile, que han formado una parte del país, que le han dado orgullo a muchas instituciones, a nuestros colegios pero sobretodo, como han demostrado esta tarde, en esta máquina tan perfecta, tan bonita, que me voy con mas orgullo de pertenecer a esta Compañía y verdaderamente  yo creo que hay que sentirse llenos de plena hidalguía en una Compañía que, pensando lo poco que fue, llegue a ser hoy día yo diría, y tal vez lo digo con mucho cariño, la primera Bomba del país. Verlos a todos ustedes marchar como me tocó hace unos meses atrás, frente al Teatro Municipal, es verdaderamente un orgullo, donde hay espíritu de trabajo, espíritu de sacrificio, espíritu de amor para la Patria. Yo les deseo que como tal vez uno de los primeros ya dije que soy el número 14, es verdaderamente honroso felicitar a esta Compañía que hoy día creo es la primera del país, que lleva el orgullo de ser una Compañía alemana con bandera chilena, y por eso podemos decir siempre VIVA CHILE… VIVA ALEMANIA”.

Los aplausos no se hicieron esperar y la emoción invadió a varios de los asistentes.

Luego hizo uso de la palabra el Bombero Cristián Michell Rubio, con motivo de cumplir 45 años de servicio y agradeció  lo que ha sido su vida en la Compañía e instó a los jóvenes a seguir los pasos de aquellos que han formado la Compañía y siempre tener claro el “Deber servir”.

Fotos y texto: Pier Karlezi Hazlebi, feuerwehrmann 15.DFK.

15. Deutsche Feuerwehrkompanie – Stadt Santiago
15 Compañía de Bomberos – Cuerpo de Bomberos de Santiago
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Teléfono: 56-2-2011092